Estar preparados Siempre - (01/08/2010)

“Aprendiendo de 10 Vírgenes”

Lectura: Mateo 25:1-13

Hoy en día en la víspera del comienzo de un Nuevo torneo de futbol, vemos equipos que se están preparando para la alta competencia. Muchos de ellos tratan de comprar nuevos jugadores para reforzarse otros no tienen el dinero suficiente y recurren a las reservas que puedan tener y ver quienes son aquellos que están mejor preparados para incursionar en primera división.

En una oportunidad había un equipo de 10 personas que esperaban llegar a ocupar su lugar reservado y esperaban con cierto entusiasmo ese momento. Pero algunas personas no habían sido lo suficientemente previsoras. De allí que el equipo de 10 se vio reducido a solo 5 que entraron a jugar el gran partido de su vida. 

El capítulo 25 de Mateo es netamente tribulacionario; y cada uno de los símbolos que aquí aparecen tienen que ver con los eventos que sucederán cuando la Iglesia de Cristo sea llevada al cielo y estar con el Señor siempre. Pero hasta que eso suceda debemos “Estar Preparados siempre”.

Pero, podemos aprender muchísimo nosotros los que esperamos el retorno de Cristo, a tomar las precauciones que algunas de ellas tomaron y a evitar los errores que algunas de ellas cometieron.

Las 10 Vírgenes representan al Remanente de Israel, a los hijos de Dios, a la iglesia. Pero 5 de ellas eran prudentes y las otras 5 Insensatas. ¿Nosotros de qué lado estamos? Este pasaje habla de las lámparas, que es la vida de las personas, habla de las prudentes, que tomaron precauciones, de las insensatas o negligentes, que no tomaron precauciones necesarias. También habla del aceite, el Espíritu Santo, que es la Unción de Dios, habla de vasijas, que ya lo veremos más adelante, y habla del Esposo que es Cristo.

“Diez Vírgenes tomando sus lámparas salieron a recibir al esposo...” (25:1)Era el momento más esperado por todas. Tenían las mismas oportunidades, pero no todas estaban preparadas, 5 de ellas eran prudentes y 5 insensatas. Hoy también Dios nos da la oportunidad a todos, pero tenemos que estar preparados porque quizás no sabemos lo que puede llegar a pasar.

“Las insensatas no tomaron aceite...” (25:3). Se conformaron con el aceite que tenían en la lámpara, pero no les fue suficiente. Está bien nuestra comunión personal, la lectura de La Palabra y orar, pero es necesario algo más. En algunos casos nos conformamos con la reunión del día domingo, con eso tiramos toda la semana, pero no es la provisión suficiente.

Las prudentes tomaron aceite adicional... ( 25:4). Contaban con más vasijas que les ayudarían al momento de la entrada y las vasijas son los vasos extras, los ministerios y los talentos. Debemos desarrollar los talentos y ministerios que Dios nos ha dado. No era solo tener la vasija, sino mantenerlas llenas de aceite. No es solo tener el talento, don o ministerio, sino estar lleno del Espíritu Santo, y que ese aceite alimente la lámpara en el momento oportuno. Tener una continua comunión con Dios nos ayuda en los momentos difíciles.

“Y tardándose el esposo... cabecearon TODAS… y se durmieron TODAS...” (25:5).Todos pasamos por momentos de un cansancio espiritual, agotamiento psicofísico, dificultades, pero tenemos que mantenernos activos.

“A la media noche... Aquí viene el esposo!” (25:6). En el momento memos esperado y de mayor cansancio se nos va a llamar a dar cuentas, la medianoche es el momento más oscuro. Por eso tenemos que estar preparados siempre.

“Todas se levantaron, y arreglaron sus lámparas” (25:7). En el griego Kosmeo significa arreglar o cosmético. Nosotros tenemos que embellecer, decorar, adornar nuestras lámparas.

“Dadnos de vuestro aceite, porque nuestras lámparas se apagan...” (25:8) ¿Porque llegar al momento de la falta de fuerzas y no ir aprovisionándose cada día un poco más de su Palabra? Así no llegaremos al momento de que nuestras lámparas se queden sin energía.

“Para que no nos falte a nosotras y a vosotras id más bien a los que venden y comprad para vosotras...” (25:9). La obtención del aceite es personal, cada uno tiene que alimentar su relación con Dios. “Velad, Porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del Hombre ha de venir” (25:13). ¡¡¡Debemos estar Alertas!!!Preparados.

¿Cómo está nuestra lámpara? ¿Tenemos las vasijas preparadas y llenas de su Espíritu Santo para estar listos? Debemos ir manteniendo las vasijas llenas para que en el momento oportuno no nos falte. 

Pero mientras tanto nuestra lámpara debe ir manteniendo su luz encendida alumbrando a quienes necesitan luz y dirección de Dios a través de Su Espíritu Santo.