Lectura: Mateo 6: 25 al 30
En estos tiempos se están viviendo momentos de crisis, momentos difíciles, pero nosotros los cristianos sabemos que esos son cambios en nuestra vida y son para procesarnos, para enseñarnos. Pero ¿Queremos tener una vida victoriosa a pesar de las crisis, de las circunstancias, de los problemas? Dios, a través de su palabra nos desafía para que superemos las pruebas.
Cuando murió el rey Usías el pueblo estaba triste, el profeta Isaías estaba mal de ánimo. Había muerto el rey, había quedado un vacío en el poder e Isaías estaba mal porque él siempre hablaba con el rey de parte de Dios. Pero en ese momento Dios ya estaba en control de la situación. A Él no se le escapa nada, es soberano. Quizás estés pasando una crisis pero a Él no se le escapa, Él te conoce, sabe tu situación, sabe tu dolor. Pero el Señor está presto para socorrerte, como lo estuvo con Isaías. ¿Por qué? Porque había una tarea que realizar y necesitaba al profeta. Por eso envió al serafín con el carbón caliente y le tocó los labios y fue purificado. Así él después pudo levantarse a hacer la obra de Dios .
Hoy El Señor quiere tocarnos con su Espíritu Santo y cambiarnos, transformarnos, purificarnos porque Dios necesita nuestra vida para lograr las cosas nuevas que se avecinan. Tenemos que hacer un cambio de nivel.
Jesús caminaba con sus discípulos y les enseñaba, los preparaba para los momentos difíciles. Jesús conocía a sus discípulos y quería lo mejor para ellos, por eso les dice “No se afanen por vuestra vida, qué van a comer, qué van a beber; ni por vuestro cuerpo, ni qué se van a poner”. Dios nos dice que no nos preocupemos por mañana, hay mucho por vivir hoy. “¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? Mirá las aves del cielo que no siembran, no ciegan, no recogen en granero y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valemos nosotros más que las aves?”. (Mateo 6: 25 al 26) Dios nos ama y nos cuida, nos protege. Si Dios se preocupa por esos pájaros, ¿por qué no se va a preocupar por mí? Él sabe nuestra situación y se preocupa por nosotros.
“¿Quién podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo? Considera los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; ni aún Salomón con toda su gloria se vistió como ellos. Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe? No se afanen por qué comer, qué beber o qué ponernos por que estas cosas buscan los gentiles, pero mi Padre celestial sabe que tengo necesidad de estas cosas. Si buscamos primeramente el reino de Dios y su justicia, todas estas cosas serán añadidas” (v. 27 al 30).
Todas estas preocupaciones las vamos a tener siempre, pero hay un secreto para tener una vida plena y es buscar el reino de Dios y su justicia. Nuestra mente muchas veces se divide, una parte cree en Dios y la otra se preocupa y vamos para un lado y para otro y eso se produce por una tensión, pero hay una mejor calidad de vida.
Veamos como ejemplo la vida de Josué, él estaba cómodo siendo la mano derecha de Moisés y lo acompañaba siempre, pero cuando muere Moisés se empieza a movilizar esa tranquilidad. Josué tuvo que enfrentar una situación difícil pero Dios le dice “esfuérzate y se valiente” pero luego le dice “esfuérzate y se muy valiente”. Cuando vienen problemas y crisis tenemos que saber que Dios está en control de todo. Si se preocupa por las aves cómo no se va a preocupar por nosotros. Dios dice que lo que pasamos nos sirve para crecer, porque nos quiere llevar a otro nivel. Cuando Moisés murió Josué subió de nivel, tuvo que llevar adelante al pueblo, ganó batallas, entró a la tierra prometida. Pero cuando no consultó a Dios perdió la batalla. Aun así, Dios le dijo que se levantara y siguiera adelante. Lo mismo tenemos que hacer nosotros. No quedarnos en la comodidad, enfrentar la situación para poder avanzar de nivel.
A veces al cambiar de nivel no subimos, vamos para abajo. José fue para abajo, de estar en la comodidad pasó a ser esclavo y hasta llegó a estar en la cárcel. Pero en Génesis 39:2 dice que Jehová estaba con él, y el capitulo 41 nos cuenta como llego a ser el gobernador de Egipto, el único que estaba por encima de él era el Faraón. Nuevamente Dios tuvo el control. Él tiene el control de todo.
Estas personas tenían el respaldo de Dios porque buscaban el reino de Dios y su justicia.
Las crisis son cambios, son crecimiento y Dios las torna para bien. Dios nos envía al Espíritu Santo que nos va a capacitar, a guiar y a enseñar en cualquier crisis. Él va a estar siempre con nosotros. Como de repente puede venir una crisis también de repente viene la libertad.
Quizás estés pasando por una crisis, pero no te preocupes. Dios está con vos y se ocupa de todo.
Por la predicadora Ana Guerrieri
No hay comentarios:
Publicar un comentario